Es lamentable aceptar que “los pueblos tienen el gobierno que se merecen”, pero la realidad manifiestamente terca impone esa anuencia. Con esa lógica se podría derivar otra máxima: “los políticos son el espejo del pueblo” ¿será? ¿Acaso Noroña, “Alito” Moreno, “Andy”, ¿Monreal, Adán Augusto, López Obrador, Fox, Haces… actúan como lo hacen porque es nuestra forma de expresarnos? Sin duda, son más los cuestionamientos que las respuestas. Lo seguro, seguro, es que nuestros políticos aparecen como la caricatura de lo patético. Lo explicamos.
Recientemente se publicó información relativa al boato que exhibe el diputado Sergio Gutiérrez Luna y su esposa (también diputada), provocando la reacción presidencial, que últimamente no se ha dado abasto clamando para que sus correligionarios se apeguen al principio de austeridad que retóricamente proclama MORENA. De inmediato, el diputado Monreal reaccionó y declaró que llamaría a Gutiérrez Luna ´para “que dé la cara” y tal vez apercibirlo de que “se castiga el escándalo, no el pecado”. ¿Alguien pudiera imaginar un diálogo entre Gutiérrez Luna y Monreal, de quien por cierto se divulgó información relativa al costoso lujo de sus vacaciones en Madrid? Seguramente las imputaciones serían mutuas y de nunca acabar, el cuento “del comal le dijo a la olla. Allí está la falsedad con la que se conduce el político, porque en la realidad compiten por saber quién tiene la cola más larga. Otro caso entre decenas es el de “Alito” Moreno, quien presentó ante la Fiscalía General demanda contra Nicolás Maduro por sus complicidades con cárteles de la droga, aunque tratándose de un dirigente partidista apegado a formular ardides debe existir una motivación para esa trama de aparente desaliño. De cualquier manera, debemos reconocer, no sin preocupación, que la “nueva” clase política en el poder ya tomó gusto por el aburguesamiento gracias al ejercicio patrimonialista del poder. Motivo más que suficiente para aferrarse al poder a como dé lugar, ¡claro! con el respaldo del pueblo bueno y sabio. |
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